Los sensores de presión sonora que tenemos instalados en diferentes lugares del municipio, nos permiten conocer en tiempo real, las condiciones de ruido de la zona, asociadas al tráfico vehicular.
Con esta información podemos determinar acciones para mejorar esas condiciones de ruido y mitigar el efecto que generan los vehículos en la vía, especialmente en los sectores de mayor circulación.